Mozo rana
Ya sé que estás contento de tu obra
y hasta adoptás un yeso de Don Juan
cuando en el bodegón,
contás a la reunión,
tu canallesca acción cobarde.
La muchachada aplaude tu viveza,
y vos tranquilamente te reís,
gozando al relatar con desenfado,
el paso desgraciado
de la infeliz.
Mozo rana,
que contás tus aventuras
en la rueda
criminal del cafetín.
Mozo rana,
fanfarrón y caradura
que igual pisoteás las honras
que tomás un copetín.
Mozo rana,
que te sentís orgulloso
de tu fama,
de muchacho ligador,
me das asco,
porque sos un pobre mozo
que ni tienes noticias
de eso que llaman honor.
La pobre se creyó que eras un hombre,
y loca de entusiasmo te siguió,
sin siquiera pensar
que la ibas a dejar
en forma tan cruel y triste.
Y ahora... para colmo, mozo rana,
sintiéndote feliz y fanfarrón,
mientras te saboreas un vaso ‘e caña,
le relatás tu hazaña
a la reunión.
Writer/s: Víctor Soliño, Guillermo Zuasti